Para evitar que se les echaran a perder, restauranteros obsequiaron alimentos perecederos a sus trabajadores, incluso algunos se los dieron como pago, pues debido a que no tienen ingresos, vieron esto como la única alternativa para retribuirles su salario durante esta contingencia sanitaria.
Lamentablemente la contingencia sanitaria por el coronavirus obligó a restaurantes y negocios de comida a cerrar sus puertas y a mandar a casa a la mayor parte de sus empleados. Si bien hay quienes continúan ofreciendo servicio a domicilio, esto apenas si representa el 20 por ciento de las ventas que normalmente tenían.
Claudio Innes Peniche, presidente local de la Canirac, señaló a El Ojo de Aguascalientes que para evitar pérdidas y sobre todo que los alimentos que ya tenían almacenados se les echaran a perder, optaron por regalarlos a sus trabajadores, algunos incluso lo hicieron a cuenta de su salario, pues ya no tuvieron ingresos para pagarles y fue la única forma que encontraron para retribuirles su trabajo.
Entre los alimentos que se repartieron se encuentran las carnes, los lácteos y las verduras. Algunos restauranteros mantienen aquellos productos no perecederos como todos aquellos enlatados y congelados.
Asimismo, indicó que algunos otros negocios de comida optaron por armar despensas con los alimentos próximos a caducar para entregarlos a aquellos grupos vulnerables que la están pasando muy mal durante esta contingencia sanitaria.
Lamentablemente la contingencia sanitaria por el coronavirus obligó a restaurantes y negocios de comida a cerrar sus puertas y a mandar a casa a la mayor parte de sus empleados. Si bien hay quienes continúan ofreciendo servicio a domicilio, esto apenas si representa el 20 por ciento de las ventas que normalmente tenían.
Claudio Innes Peniche, presidente local de la Canirac, señaló a El Ojo de Aguascalientes que para evitar pérdidas y sobre todo que los alimentos que ya tenían almacenados se les echaran a perder, optaron por regalarlos a sus trabajadores, algunos incluso lo hicieron a cuenta de su salario, pues ya no tuvieron ingresos para pagarles y fue la única forma que encontraron para retribuirles su trabajo.
Entre los alimentos que se repartieron se encuentran las carnes, los lácteos y las verduras. Algunos restauranteros mantienen aquellos productos no perecederos como todos aquellos enlatados y congelados.
Asimismo, indicó que algunos otros negocios de comida optaron por armar despensas con los alimentos próximos a caducar para entregarlos a aquellos grupos vulnerables que la están pasando muy mal durante esta contingencia sanitaria.
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